¿Existirá alguna religión Calamarística como la que ya posee tu compatriota Diego Armando?. Si es así, he aquí un nuevo adepto, falto de fe y lleno de esperanza.
Hoy es un día para olvidar, pero para ser recordado. De hecho, de todo se aprende.
Como siempre, seguiremos hacia delante, no hay más remedio. Que dura es la vuelta de las vacaciones...
Seguiré buscándole sentido a aquello que no se sabe si lo tiene de forma aparente.
"Seguirem lluitant" que decimos los lugareños de estos lares.
viernes, 31 de agosto de 2007
miércoles, 29 de agosto de 2007
Como cuesta arrancar
Es el comentario interno que más se repite en mi mismo todas esta semana. Tres semanas de desconexión absoluta de la rutina cotidiana dan para mucho. Comprarte una cama nueva y montarla (de IKEA y sus "maravillas" ya hablaré en otro momento...), retomar costumbres de baños marinos, baños de sol, después de varios veranos totalmente montañeros, viajar a la otra punta del país, efectuar maridajes de pescaditos fritos y buenos vinos blancos basados en esa gran desconozida que es la palomina fina (larga vida al Barbadillo!), descansar, descansar y descansar, y todo ello en una compañía inmejorable.
No me extraña que el retorno a lo "normal" sea tan y tan duro. Pero claro, es un activo nuestro, de los humanos, el de la queja. Si no nos quejaramos nos instalaríamos en la más absoluta conformidad, y yo me declaro inconformista.
Me voy a dedicar a arrancar durante la semana, aprovecharé el fín de semana para descansar, y a partir del lunes, a tope hasta navidades. Me queda una semana de vacaciones, y este año no me disgustaría en absoluto celebrar un fin de año lejos de casa y rodeado de ese blanco elemento antes líquido y después cristalizado sobre el que te puedes deslizar con dos tablas de madera atadas a los pies. ¿ Courchevel ? No estaría mal sin duda alguna.
Dejo aquí lo que ha sido la banda sonora de mis vacaciones, que como no podía ser de otra manera pone voz mi bien amado Calamaro y los añorados Rodríguez, "Mi enfermedad". Seguiremos informando...
No me extraña que el retorno a lo "normal" sea tan y tan duro. Pero claro, es un activo nuestro, de los humanos, el de la queja. Si no nos quejaramos nos instalaríamos en la más absoluta conformidad, y yo me declaro inconformista.
Me voy a dedicar a arrancar durante la semana, aprovecharé el fín de semana para descansar, y a partir del lunes, a tope hasta navidades. Me queda una semana de vacaciones, y este año no me disgustaría en absoluto celebrar un fin de año lejos de casa y rodeado de ese blanco elemento antes líquido y después cristalizado sobre el que te puedes deslizar con dos tablas de madera atadas a los pies. ¿ Courchevel ? No estaría mal sin duda alguna.
Dejo aquí lo que ha sido la banda sonora de mis vacaciones, que como no podía ser de otra manera pone voz mi bien amado Calamaro y los añorados Rodríguez, "Mi enfermedad". Seguiremos informando...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)